Vital Agenda Global

Autor: Darío Botero Pérez
Enviado por: Darío Botero Pérez

Ya se trate de metrópolis o de satélites, independientemente de su ideología, los sátrapas que gobiernan los países corrompidos por el Neoliberalismo están comprometidos con la depredación de la biosfera.

Quizás sean más ignorancia disfrazada de conocimiento superior -como lo pretenden las doctrinas neoliberales elaboradas por la sionista atea, rusa nacionalizada como usana, Ayn Rand; revestidas de rigor académico por la Escuela de Chicago y su precoz premio Nobel de Economía, Milton Friedman, supuesto rival de la Rand, e impuestas a las neocolonias mediante el llamado “Consenso de Washington”- lo mismo que cortoplacismo, en vez de pura perversidad conciente, los motivos de los cipayos para prestarse a las maniobras de los potentados dirigidas a acabar con el Mundo.

Tal vez crean que la cesión de riquezas naturales no renovables -que les arrebatan a las comunidades autóctonas y cuya conservación es un objetivo fundamental de la Sociedad Democrática Global, pues sabemos que su pérdida es irreparable y su explotación, una irresponsabilidad absoluta e imperdonable- les permitirá desarrollar una buena gestión porque los capitales que ingresen para financiar el saqueo -aunque representados por divisas sin valor, como el dólar o el euro- les aportarían una pasajera ilusión de progreso, reflejada en el aumento del PIB primario.

Tan enfermizo enriquecimiento lo logran mediante la extracción de tesoros naturales irremplazables cuyo despojo nos empobrece a todos, en vez basarlo en la producción de bienes de consumo de origen agropecuario, capaces de calmar el hambre y las necesidades de ingresos sanos.

En estas circunstancias, el aumento del PIB del sector primario no indica crecimiento en la producción interna sino el grado de saqueo al que someten a la Naturaleza los potentados sicópatas que todo lo acaparan buscando destruirlo. En consecuencia, su aumento es una pésima noticia para los pueblos y la Vida, aunque los potentados lo postulen como la gran demostración de progreso a la que nadie puede oponerse.

En todos los rincones del globo se cierne la amenaza. Una pequeña muestra de los crímenes ecológicos en curso en Latinoamérica, tanto como algunos aportes teóricos susceptibles de crítica y bastante ilustrativos, se anexan a esta “Vital Agenda Global” para descalificar a los escépticos adoradores del dinero, cuya adquisición consideran la mayor proeza que puede realizar un ser humano en su Vida.

Así lo postulan porque carecen de creatividad al no haber podido evolucionar al mismo ritmo que la gente sana y decente. No han podido superar sus cerebros reptilianos o de sicópatas, que los inducen a adorar la fuerza mientras desprecian y persiguen la inteligencia para eliminarla o subordinarla.

La existencia de los llamados niños índigos y cristales les es absolutamente inadmisible, pues creen haber monopolizado el conocimiento en sus academias, de modo que su dominio absoluto lo consideran inexpugnable, lo cual es una estupidez propia de todos los imperios, sobre todo notable cuando les llega su decadencia definitiva.

Así son, lo cual los convierte objetivamente en enemigos comunes que todos estamos obligados a denunciar, combatir y derrotar, despojándolos del poder y la riqueza que a todos nos pertenecen.

De ahí que, dada la importancia formal otorgada al dinero para que las economías de mercado funcionen, sea tan útil, contundente, vital para los pueblos y mortal para los banqueros potentados, crear monedas nacionales que despojen del poder económico a los estafadores para devolvérselo a los ciudadanos en términos de poder adquisitivo, en particular a los empresarios y los trabajadores que producen riquezas reales (y no meramente convencionales, como los papeles basura con que los banqueros sionistas estafan a los rentistas y amenazan arruinar los fondos de pensiones, contando con el apoyo y la complicidad de los gobernantes lacayos).

Lo invito a profundizar en los temas mediante la consulta a los enlaces que traen algunos de los anexos. Igualmente, a que incluya en sus preocupaciones cotidianas la denuncia y el combate al ecocidio y la guerra mundial que los sionistas apuran en todos los frentes de actividad humana para cumplirle a Yahvé sus sueños y mandatos apocalípticos, tan inhumanos y mortales.

Es particularmente aclarador el anexo que analiza las consecuencias de la minería, a saber, “Los perversos versos de la minería. 21 preguntas para entender la minería del Siglo 21.doc”. También es útil el que aporta enlaces sobre el clima: “Climats de Gaïa.mht”. Permite descubrir las mentiras a que ha dado lugar su cambio para ocultar las atrocidades a que someten las corporaciones a la Naturaleza, destruyendo aceleradamente las condiciones que permiten la existencia y reproducción de la Vida. Igualmente aporta el que discute el concepto de Economía Verde (Ver “El concepto de ‘Economía Verde’ abre polémicas entre los ambientalistas.doc”). Pero todos son interesantes e iluminadores, como lo podrá comprobar quien los lea. Sin embargo, apenas cubren una pequeña parte de las agresioens que nos amenazan, de modo que todos estamos obligados a luchar para detenerlas tanto como a denunciarlas para concitar el apoyo de los mejores ejemplares de la especie.

De todos modos, el carácter depredador y criminal de las recetas neoliberales queda absolutamente desenmascarado ante cualquiera que pretenda ser objetivo al analizar la realidad catastrófica que impulsan los potentados a través de sus monopolios militares, industriales y financieros, tanto como mediante el control a los cipayos que traicionan a los pueblos mientras dicen gobernarlos.

Así mismo, los enemigos comunes logran imponer y perpetuar sus absurdos acudiendo a la desinformación difundida por los “mass media”, según les ha enseñado Rupert Murdoch para mantener a las masas ignaras sometidas a idioteces, impidiendo que devengan en multitudes conscientes de seres soberanos interesados en la determinación de sus vidas y en las de los demás miembros de la especie.

Consideran que tienen el derecho a imponer sus versiones de la realidad a fin de garantizar que sus privilegios permanezcan incólumes, como lo demuestra el caso del periódico ecuatoriano El Universal, que no tuvo inconveniente en tergiversar la Verdad para convertir el intento de golpe de estado de la derecha ecuatoriana del 30 de septiembre de 2010, en un atropello del supuesto dictador Rafael Correa contra los abusos de los oligarcas tradicionales, consuetudinarios y arrogantes vendepatrias encargados de mantener al pueblo desinformado y sumiso.

Tal abuso es demostrativo del cinismo absoluto de los potentados y sus lacayos de la prensa, que viven convencidos de que son superiores y pueden actuar impunemente mientras defiendan los intereses de los opresores legítimos; o sea, los despojadores de los pueblos y dueños de los medios de producción, de financiación, de represión y de alienación.

No sólo son parciales y sesgados en su desinformación masiva, sino que acuden a la calumnia y se enojan cuando les cobran sus delitos o los de sus mentores. Inclusive, acuden a sus homólogos en el Mundo, siervos de los potentados a cuyo servicio incondicional se dedican, para exigir la conservación de sus privilegios y la impunidad para sus miembros delincuentes, así su delito sea una calumnia grave contra un jefe de estado responsable, que logró evitar la asonada que le armó la oposición oligárquica y desalmada, siempre alineada al servicio de las multinacionales.

Siguen considerándose superiores y ajenos a la justicia, como el esposo de la infanta Sofía en España, quien no tiene inconveniente en negar su participación en las estafas efectuadas a través del grupo Nóos, efectuadas aprovechando su relación íntima con la casa real, algo que tanta carga fetichista conlleva para seducir ingenuos descaracterizados.

Por eso mismo, tampoco le han cobrado a Juan Carlos el fratricidio que Franco le obligó a cometer para atemorizar al padre, forzándolo a renunciar a su derecho a la corona en favor de su hijo mayor, el pupilo del catolicísimo aficionado al fútbol y al asesinato impune de opositores, el caudillo Francisco Franco Bahamonde, otro de esos seres que, como Augusto Pinochet o Álvaro Uribe Vélez, avergüenzan a la especie humana y no podemos seguir tolerándolos.

En fin, como cualquier Dominique Strauss-Kahn bien posicionado en el Club Bilderberg, los potentados se saben o se sienten inmunes y hasta con derecho a prostituir la Verdad y la honradez.

En cuanto a los vendepatrias, los manejan los sionistas y demás halcones potentados a través de agencias imperialistas diseñadas y, sobre todo, puestas a su servicio, por los Rotschild, quienes no son sólo sionistas sino destacados maestros masones de grado 33, el de los auténticos dueños y guías del Mundo y amos del prójimo durante el aterrador período antropológico que denominamos Historia y que estamos en trance de superar.

Debemos evitar perecer con ella, pues ese destino les corresponde a los monstruos que la han usado para garantizarse privilegios que ya a nadie se le volverán a reconocer en la Sociedad Democrática Global que remplace las jerárquicas, depredadoras y represivas imperantes en la era caduca.

Junto a la irremediable decadencia del sionismo y sus sociedades afines, han de caer y desaparecer las agencias imperialistas puestas al servicio de los enemigos comunes, como el Banco Mundial (BM), el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la Organización Mundial del Comercio (OMC), el Banco Central Europeo (BCE), la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y hasta la misma Organización de Naciones Unidas (ONU).

Todas ellas han estado encargadas de difundir e imponer la ruinosa e irracional doctrina neoliberal con sus recetas rabiosamente antieconómicas, capaces de destruir el Mundo para la mayor gloria de Yahvé y sus ministros sionistas, así sean ateos como Ayn Rand, en particular los monopolizadores del sistema financiero mundial, lon cual les permite subyugar y hasta arruinar a cualquier empresario que acuda al crédito para desarrollar su aporte a la sociedad.

Pero mientras los asuntos financieros se pueden remediar con un simple cambio de convenciones sociales -como lo habrán de hacer los griegos, los españoles, los italianos, los portugueses, los irlandeses y tantas víctimas más de los banqueros ladrones, siguiendo el ejemplo de los islandeses para disfrutar las maravillas creadas por la mente humana, rechazar la violencia, no morirse de hambre ni continuar subyugados por potentados enemigos de la Vida-, el boom minero es el Requiscat In Pace (RIP) para el Medio Ambiente, de modo que es indispensable derrotarlo antes de que se despliegue totalmente, si aspiramos a conservar, siquiera, alguna esperanza de futuro digno.

De ninguna manera podemos aceptar la miserable negociación impuesta a los vendepatrias: cambiar riquezas irremplazables e irrecuperables por divisas sin valor que la FED emite al ritmo que le indiquen sus amos a Ben Bernanke, el barbudo que funge como jefe de esa oficina privada, que dirige la economía usana desde principios del s. XX..

La cresta del cerro se desmorona y el deslizamiento se advierte por la foto gentileza de El Potosí

El deterioro del Cerro Rico -“esta histórica mole que deslumbró al mundo por mas de cinco siglos y que enriqueció coronas, gobiernos, corporaciones, dirigentes del gremio, familias y clanes misteriosos”- es el resultado de “466 años de explotación” por socavón de los tesoros del Potosí, en Bolivia. (Citas y fotos tomadas del anexo de Enrique Bachinelo: “¡EL FAMOSO CERRO RICO DE POTOSÍ SE DESMORONA!”).

En Marmato, Colombia -y no sólo allí, pues es frecuente en muchos otros rincones y países, según lo puede constatar cualquiera con sólo echar una mirada a su entorno-, se observa algo similar: Los depredadores insisten en continuar sus saqueos, preferiblemente mediante juegos sucios como los de la “Gran Colombia Gold Corp”, según se lee en el anexo respectivo: “Sin siquiera ser propietarios del suelo -que también miles de marmateños han afirmado no le venden-, sin poseer los títulos mineros necesarios para el desarrollo de una minería a cielo abierto, sin cumplir con los trámites de licencia ambiental y, menos aún, sin contar con la voluntad de comunidades indígenas y afros asentadas en la zona desde tiempos ancestrales y que deben ser consultadas, la compañía pretende imponer su decisión de construir una explotación minera a cielo abierto” (Ver Gran Colombia Gold Marmato.doc).

Volviendo al Cerro Rico, la famosa mole pertenece al mismo país que tiene tanto litio como Chile y Argentina pero que -valiéndose del carisma de su presidente indígena, otro de esos populistas que agitan tesis antiimperialistas y hasta revolucionarias mientras les entregan a las multinacionales las riquezas naturales de los países que manipulan-, prefiere agredir la Amazonía atravesando el TIPNIS con una carretera al servicio de la mafia -aunque digan que es en beneficio de los raizales, como manda la demagogia populista- en vez de aprovechar su riqueza natural para establecer empresas que exploten su maravillosa fuente de energía limpia, dejando de “negociarla” con corporaciones carentes de cualquier respeto por la Madre Tierra e interesadas exclusivamente en elevar sus utilidades corporativas a corto plazo, así el precio sea acabar con el Medio Ambiente.

La explotación íntegra del poder productivo del litio sería una estupenda alternativa para las organizaciones latinoamericanas independientes de la agencia de colonias que es la OEA. Ofrece fuentes de empleo de calidad tanto como productos de exportación cuyos mercados están asegurados y son gigantescos.

Puede constituir un frente de desarrollo independiente, respetuoso de Pachamama, que les permitiría a los países afanados por reivindicar su independencia y relacionarse en términos respetuosos con la Naturaleza, contar con una fuente de energía limpia destinada a suplantar los necrocombustibles.

Tal como la renuncia de la población a seguir utilizando el inhumano sistema monetario impuesto por los potentados para mantener y aumentar sus privilegios mientras sumen a los pueblos en la miseria, impidiéndoles disfrutar el nivel de desarrollo alcanzado por la especie y que se apropian sus más repugnantes ejemplares, el rechazo a las sociedades jerárquicas y consumistas con el propósito de establecer una de corte mundial, plana, justa e igualitaria, requiere la renuncia a agredir la biosfera, adoptando prácticas productivas realmente sustentables y duraderas, como las aplicadas por los “hermanos mayores” desde hace milenios.

Es algo indispensable para sustentar la Sociedad Democrática Global que supere el criminal Nuevo Orden Mundial diseñado por los enemigos comunes para exterminar al 95% de la población y poner al 4% restante a atender al 1% de potentados con complejos de dioses y cerebros de reptiles, que se creen dueños del Mundo y amos del prójimo, y que confían en sobrevivir a la gran hecatombe programada por los sionistas y que regímenes totalitarios como el de Irán o el de Corea del Norte pueden acolitar buscando conservar sus propias dictaduras.

De decidir explotar directamente sus riquezas y preparar adecuadamente a la población, la prominencia económica que alcanzarían las hasta ahora denigradas neocolonias, sería ejemplar y muy superior a la de USA y los demás imperios conocidos en la Historia, que se han basado en el saqueo apoyado por la fuerza, lo cual es absurdo en la Sociedad del Conocimiento.

O sea, la depredación y tantos abusos más propios de las sociedades de clases, son inadmisibles en ésta Sociedad Democrática Global que estamos estableciendo para superar la agonía en que nos tienen sumidos los potentados. El propósito común y unificador es asegurarnos un futuro digno para todos, lo más pronto que se pueda.

Incidentalmente, el litio y las industrias que lo explotan constituyen una oportunidad extraordinaria para la Cuba que se apresta a destruir su litoral en aras del afán por superar la crisis económica causada por el Neoliberalismo. Lo hace apoyando la destrucción propiciada por las petroleras imperialistas, tan comprometidas con la estrategia sionista por precipitar el Fin del Mundo.

Rechazar la depredación petrolera y optar por aprovechar el litio de los países hermanos para crearse un futuro sólido, sería una decisión que mantendría el prestigio de un pueblo ejemplar -que ha sido capaz de soportar la presión por sojuzgarlo proveniente del Imperio más asesino e impostor-, pero que, para decepción de los revolucionarios, por decisión de “su” gobierno se apresta a caer como siervo de las multinacionales que se han prestado para mantener el bloqueo que le decretó USA.

Por ende, sin duda y definitivamente, las tareas que impidan el anunciado Apocalipsis sólo las puede asumir y resolver el pueblo acudiendo a su creatividad. No las puede solucionar ningún caudillo, por muy Hítler que se crea, por muy Napoleón que parezca, o por muy Quinto Jinete del Apocalipsis que lo hayan calificado, como el lamentable Gadafi y sus arrogantes hijos asesinos.

Las ejemplares reacciones de los peruanos habitantes de Cajamarca contra el proyecto Conga; el digno rechazo de los bolivianos a la violación del Tipnis; la reacción de los santandereanos en Colombia para impedir la destrucción del páramo de Santurbán por la Greystar, empeñada en destruir una fábrica natural de agua a cambio del oro que posee la montaña; o la oposición radical de los indígenas panameños a la destrucción de la selva para extraerle algunos de sus tesoros menos significativos pero que son los únicos apreciados por los sicópatas; todas ellas son actitudes ejemplares que orientan la lucha de la Humanidad contra quienes quieren exterminarla y lo están haciendo.

Los potentados, aunque no lo sepan algunos porque la codicia o su ideología paranoica los enceguecen, dirigen todas sus actividades a satisfacer la obsesión sionista mientras se esmeran por impedir que los pueblos sumidos en el desprecio, el saqueo inmisericorde de la Naturaleza, las pestes, la alienación, la ignorancia, la violencia, la arbitrariedad y el hambre, lo entiendan y lo impidan.

Retornando al Cerro Rico, si hubiese estado sometido a la minería a cielo abierto, ni rastros de un morro existirían. Así lo garantiza el asombroso nivel de depredación (o alta productividad, según los cínicos) que nos ofrecen las grandes multinacionales mineras para acabar con la biosfera a corto plazo, como lo hace con sus aterradoras explosiones de terrenos la Drummond en la Guajira colombiana, robándose el carbón que le han cedido los vendepatria y cuya defensa les ha costado su vida a por lo menos 500 sindicalistas, asesinados, con la complicidad del gobierno, en particular el del dictador Uribe Vélez, por paramilitares pagados por la multinacional.

Carecen de escrúpulos y disponen de técnicas y maquinarias asombrosas ante las que ningún obstáculo natural es insalvable ni puede durar incólume por algún tiempo después de que caiga en la mira de los depredadores.

Todos los gobiernos son cómplices del crimen, pero los pueblos están en condiciones de evitarlo, neutralizando y castigando a los criminales. Es hora de deshacerse de quienes consideran como desarrollo lo que cualquier ser decente entiende que es un delito innegable e imperdonable contra Pachamama y la Vida que sustenta, de modo que no podemos permitir que continúe ni dejar de castigarlo.

Imagen del “cerro rico” conservando su forma cónica original. Ahora la simetría de la mole va cambiando por los deslizamientos que se están produciendo en su cresta y el hundimiento en varias regiones de su exterior. (Foto El Siglo de Potosí)

Como no se trata de quimeras inalcanzables ni de histerismos de beatas insensatas pero muy creyentes y combatientes, sino de realidades que descalifican totalmente a las sociedades jerárquicas empeñadas en la destrucción de la biosfera y la extinción de la Vida, la existencia de autos eléctricos y hasta movidos con agua, o con hidrógeno para producir agua potable como subproducto, es real desde 1996, por lo menos.

Conviene saberlo para no seguir creyendo los engaños de los lacayos de los Rotschild. Igualmente, para tener argumentos contundentes que nos permitan oponernos a la sobre explotación de los recursos, incluyendo la extracción por métodos no convencionales del petróleo que queda en las enormes cavernas que ha dejado la explotación convencional.

Esta aterradora amenaza -que en Colombia comprende más de 100 extensas explotaciones regadas por la inmensidad del territorio y ofrecidas impúdicamente a las petroleras internacionales, como golfas baratas en carnaval, por el gobierno del sionista neoliberal Juan Manuel Santos que sucedió en el gobierno central al mafioso dictador, también neoliberal, Álvaro Uribe Vélez- consiste en llenar con agua dulce esas inmensas oquedades dejadas por la extracción convencional, para forzar a fluir el petróleo retenido por las piedras porosas pero que suele flotar en el agua, facilitando su recolección.

El actual alto precio del petróleo permite que los costosos procedimientos que implica semejante atentado contra la Tierra, sean rentables para las petroleras apoyadas por los gobiernos venales y traidores de sus pueblos, que les ofrecen todas la garantías para que adelanten sus saqueos y hasta les construyen la infraestructura necesaria para que sean lo más eficaces y nocivos posible.

Desde luego, según lo postula y exige el Neoliberalismo, el gran criterio es que sean extraordinariamente rentables para los inversores extranjeros, conviene no olvidarlo porque, en contraste, a los pueblos sólo les queda una miseria eterna.

Pues lo cierto es que el alto costo, muy superior al valor de mercado de lo que extraigan, es el envenenamiento permanente de aguas potables, cuando la mayor necesidad que vislumbra la Humanidad para el s. XXI y los que le siguen, es disponer de bastante de ese bebestible indispensable para evitar la sed a que nos condenan estos criminales, que posan de grandes empresarios amantes de la filantropía mientras sostienen que la Tierra apenas alcanza a sustentar 500 millones de humanos, de modo que sobran 6.500 millones (cerca del 93%), y están haciendo todo lo posible para garantizar su exterminio.

O sea, es evidente que los daños que producen los depredadores mineros (tanto como los causados por taladores, pescadores y cazadores de carácter industrial, o por las empresas dedicadas a producir venenos y semillas genéticamente modificadas, como Monsanto) cuestan mucho más de lo que reciben por vender lo obtenido y convertir en basuras y sustancias tóxicas el resto de lo extraído.

Pero es peor, pues nadie es capaz de remediar los daños causados. Ni con la fortuna de los Rotschild -que supera el 80% de la acumulada por la especie y sigue creciendo a costa del hambre de los griegos y demás víctimas- se recuperaría una mínima parte de lo que tan alegre e irresponsablemente destruyen, incluyendo la diversidad genética, para mayor gloria de Yahvé y desgracia de la Humanidad y la Vida.

La imposibilidad para reparar los daños causados en el golfo de México por la BP en 2010, o por las centrales nucleares de Fukushima en Japón, desde 2011, es suficientemente contundente como para negar los efectos catastróficos o no tenerlos en cuenta al juzgar estas sociedades jerárquicas y depredadoras que tenemos la obligación de superar si no queremos desaparecer con la Historia que las engendró y las tiene condenadas.

Aunque científicamente es posible -lo cual nos augura un fututro sorprendente que debemos precisar y consolidar, como lo estamos haciendo-, ni con todo el dinero del Mundo se puede recuperar una especie extinguida en las sociedades jerárquicas y consumistas que nos niegan el acceso a las tecnologías que nos permitirían ser como dioses, según sueño de Bertrand Russel.

Los cipayos prefieren convertirnos en asesinos para que los potentados puedan conservar y aumentar sus privilegios, como lo exige la dinámica capitalista, en beneficio de unos cuantos privilegiados y contra las inmensas mayorías. De ahí la necesidad de derrotar la Historia, enterrándola junto a los potentados que han reinado en ella, para establecer la vigencia universal de la Sociedad Democrática Global.

Es un asunto que nos compete a todos, pues todos nos beneficiaremos si vencemos, pero tampoco dejaremos de sufrir las consecuencias si vencen los sionistas y sus maestros masones.

La realidad de la existencia de fuentes limpias de energía es innegable, de modo que su rechazo y su ocultamiento permiten dimensionar el tamaño del crimen ecológico producido por el uso de necrocombustibles.

El anexo Autos.Ele es viejo pero sus soluciones siguen ocultándose y eludiéndose, a pesar de que algunos países, como Finlandia, y ciertas multinacionales, como la Renault, han iniciado la producción masiva de vehículos impulsados por energía eléctrica.

El propósito es romper la dependencia respecto a esos necrocombustibles orgánicos resultantes de la descomposición milenaria de vegetales y animales (petróleo, gas y carbón), que al ser extraídos y consumidos destruyen los equilibrios magnético-energéticos y envenenan el ambiente. Igualmente se rechaza la dependencia respecto a los agro-combustibles, cuya producción conlleva dejar de cultivar en tierras fértiles y escasas alimentos aptos para derrotar el hambre.

Finlandia y las multinacionales están aprovechando la mediocridad de los latinoamericanos.

Aunque Chile, Argentina y Bolivia poseen enormes depósitos de litio, sus ineptos y demagogos gobernantes son incapaces de explotarlo en beneficio propio, de modo que se lo entregan -por comisioncitas y honorarios miserables pero suficientes para satisfacer las pequeñas miserias de los vendepatrias- a transnacionales neoliberales cuya única responsabilidad social es velar porque los ricos cada vez sean más ricos, a costa de los pobres y de la biosfera, desde luego.

Lo invito a que vea la presentación, esperando que saque conclusiones sensatas sobre los criminales que nos desgobiernan, a ver si considera digno sumarse a quienes los combaten.

Afortunadamente, otras empresas europeas y japonesas han continuado en la vía del cambio a energías limpias, de modo que los ecologistas adinerados pueden seguir disfrutando de la autonomía y la libertad que les brindan sus vehículos, sin contaminar como quienes siguen usando automotores movidos en base a fuentes sucias. (Ver anexo “Energías renovables 0.htm”)

Desde luego, si USA lo hubiese hecho desde 2009 siquiera, cuando eligieron al farsante Barak Obama y la General Motors, que ya tenía experiencia en la fabricación masiva de autos eléctricos, estaba quebrada y a merced del gobierno que la salvó dándole liquidez, la crisis económica y ambiental sería menos grave. O, inclusive, estaríamos superándola en vez de llevarla hasta límites de los que difícilmente habrá escapadero.

Hay alguna esperanza si antes de que las multinacionales mineras arrasen con el Mundo entero -lo cual tienen planeado en gran medida para este 2012-, la Humanidad reacciona multitudinariamente y logra imponer la sociedad plana u horizontal e igualitaria que anhelamos, mediante el cambio radical de toda la institucionalidad jerárquica que ha imperado en la Historia y que nos ha traído al borde del abismo.

Desde luego, la mentalidad consumista que todo lo convierte en basura también ha de ser repudiada, aunque sólo sea como muestra de respeto por el trabajo humano y las energías que consume y que no es justo desperdiciar, tanto como expresión del respeto a la Madre Naturaleza que de todo nos provee si sabemos relacionarse dignamente con ella.

Es un asunto de ciudadanos libres, soberanos y tolerantes. De ninguna manera podrá resultar de la actividad de los políticos profesionales que están vitalmente (o mortalmente, mejor) comprometidos con el sistema consumista y depredador impuesto por la masonería y que los sionistas quieren usar, adobándolo con la guerra, para realizar su Apocalipsis de manera contundente e irremediable, a la vista de todos y contra aquellos que consideran ajenos al “pueblo elegido”, incluyendo tantos judíos pobres pero lúcidos.